
Hay un protagonista indiscutible de este mes de agosto: la ola de calor. Se ha mantenido impasible a lo largo de los casi 20 días que han trascurrido desde que comenzó el mes, convirtiéndose en una de las más largas desde que se tienen registros. Si bien se espera que este martes amainen las temperaturas, cabe destacar que, desde su comienzo hasta ahora, las muertes por altas temperaturas se han multiplicado por más de trece.
Así se recoge en datos del Sistema de Monitorización de la Mortalidad Diaria (MoMo). El anómalo episodio dio comienzo el 3 de agosto, cuando se registraron 8 fallecimientos por esta causa. Estas cifras fueron escalando hasta tal punto que, este pasado sábado, día 16, se registraron un total de 113, el número más alto en lo que va de año.
Agrupando por semanas, en los siete días que van del 4 al 10 de agosto, se produjeron 290 muertes. Sin embargo, en la siguiente, con fechas comprendidas entre el 10 y el 17 de agosto, los fallecidos alcanzaron 622; es decir, un aumento de más del 114%. En total, en lo que va de mes se han producido 931 muertes.
Por edades, el mayor número de decesos en la peor semana se produjeron en los mayores de 65 años, con 609. Dentro de este grupo, los que tuvieron peor suerte fueron los mayores de 85 años, con un total de 423 muertes. En aquellos con edades comprendidas entre los 75 y los 84 años, se alcanzaron un total de 138 fallecimientos.
En agosto de 2024, el día que más muertes se produjeron fue el 12 de agosto, con 57 muertes. En total, en las primeras dos semanas de dicho mes en 2024 se produjeron unas 500 muertes. Es decir, en comparación con el mismo mes del año pasado, las muertes son casi el doble.
Hidratarse y cuidar a los que más lo necesitan
El Ministerio de Sanidad recuerda que "el calor mata y supone un grave riesgo para la salud". Por ello, instan a "no bajar la guardia" y a "hidratarse, protegerse, y cuidar a los que más lo necesitan". En este sentido, es preciso resaltar que el calor también agudiza los síntomas de algunas patologías, como las cardiovasculares, las renales y las respiratorias, entre otras.
Por otro lado, tal y como recuerdan desde el departamento de Mónica García, desde un enfoque biológico, la exposición a temperaturas excesivas puede provocar problemas de salud como calambres, deshidratación, insolación y golpe de calor (con problemas multiorgánicos que pueden incluir síntomas tales como inestabilidad en la marcha, convulsiones e incluso coma).
En general, una persona sana tolera una variación de su temperatura interna de aproximadamente 3ºC sin sufrir consecuencias importantes. A partir de 37ºC se produce una reacción fisiológica de defensa. Las personas mayores y los menores son más sensibles a estos cambios de temperatura.
Relacionados
Los contenidos publicados en Gaceta de Salud han sido elaborados con afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios recogidas por un grupo de periodistas especializados en el sector. Recomendamos al lector consultar cualquier duda relacionada con la salud ante un profesional del ámbito sanitario.